A Miguel de Santiago se le conoce como un hombre de carácter
violento, sobre todo debido a ciertas leyendas sobre sus impulsos criminales,
entre los cuales se destacan dos: el ataque a su esposa y el popularmente
conocido como "El Cristo de la Agonía".
El primero cuenta que le encargó a su mujer el retrato
terminado de un Oidor de la Audiencia, para que esta lo vigilase mientras él
viajaba a Guápulo. Mientras la obra se secaba en el patio de la casa, y durante
un momento de descuido de la mujer, un cerdo tumbó el caballete sobre el que
descansaba el lienzo y este se ensució; asustada la mujer pidió a Nicolás
Javier de Goríbar, uno de los mejores estudiantes de su esposo que lo
arreglara. Al regresar Santiago, lo invadió una gran cólera al ver que su obra
había sido retocada en el área de la mano; entonces despidió a su discípulo y
atacó a su esposa con una espada, cortándole una oreja. Luego de esto llegó el
Oidor a retirar su retrato, pero tuvo que marcharse debido a que Santiago tenía
intenciones de matarlo también. Según algunas crónicas de la época, este hecho
pudo ser cierto, pues Miguel de Santiago pidió asilo en el convento de San
Agustín durante un tiempo, para así evitar un juicio que le había planteado su
esposa, aunque no se sabe a ciencia cierta si se trató de este hecho.
La segunda leyenda, y la más popular, tratan sobre un cuadro
de Jesús crucificado que le encargaron los agustinos para su iglesia.
Obsesionado con lograr una escena lo más realista posible, ató a uno de sus
estudiantes a una cruz para copiar sus rasgos, pero no consiguiendo la cara de
dolor que buscaba decidió atravesarlo con una lanza por el costado; logrando
finalmente la expresión facial que tanto deseaba. Para cuando bajó a su
estudiante de la cruz, este ya había fallecido. El cuadro pintado de ese modo,
titulado "El Cristo de la Agonía", podría ser según algunos el Cristo
a la columna del Museo de Arte Colonial, de Quito. Se dice que el asilo que le
dieron los agustinos en su convento puede estar más relacionado con este hecho
que con el ataque a su esposa.
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